10 Ene Bodega Pago Balancines: aquí me quedo

Siempre digo que cuando el mundo del vino te atrapa, lo hace con una fuerza extrema. Esto es lo que le ha pasado a Pedro, de Pago los Balancines. De arquitecto a productor de vinos, lucha por quitar el estigma de vinos a granel de Extremadura, y lo hace como mejor sabe, con unos vinos que están llamando la atención dentro y fuera de España.

¿y cómo es que para hacer vinos de calidad elige una zona con una fama así? Pues parece fácil pero no lo es. Después de mucho viajar buscando el sitio ideal para cultivar lo que tenía en mente, llegó a Oliva de Mérida, en plena D.O. Ribera del Guadiana para desmontar mitos:

• Zona de producción a granel, si, pero con viñedos en vaso y sin riego, obteniendo unos 1.700 kg por hectárea, que unido a una clasificación muy estricta de las uvas, todavía puede ser menor.
• Sin riego, si, pero con un suelo que filtra las lluvias entre las piedras y crea una pequeña reserva de agua a unos 2 m bajo tierra donde no entra el calor para evaporarla.
• Con mucho calor, si, pero con una brisa continua en el viñedo al estar en un lugar de paso entre dos sierras.
• Con mucha diferencia térmica entre el día y la noche, si, pero con una bodega tan bien orientada que se mantiene fresca durante todo el año y con un diseño de lujo: ventanas que solo se abren hacia la zona orientada al fresco, corrientes de viento por el interior de la bodega que traen el fresco al interior, bocas de agua integradas en las barandillas y lo que más llama la atención, ventanas en la parte superior de la bodega que parecen cuadros colgados en vez de un paisaje real, y hasta la sala de catas que sobrevuela el viñedo.

Dentro de este diseño tan concienzudo, chirrían las piscinas delante de la bodega en una zona tan seca como Extremadura, pero cuando su razón es mantener la frescura de la sala de barricas que está bajo ellas, sorprende de nuevo.  Y el amor por la tierra cultivada se extiende a otros usos tradicionales, con el criadero de mastines en la misma parcela para cederlos a pastores y recuperar la especie. En resumen, conocer esta bodega, sus vinos y su forma de trabajar es más que recomendable.

Nos gustan los vinos con historia