09 Mar Bodega luna de reina: para mi reina la luna
Llevamos varios años viendo cómo hay gente joven- cada vez más- que harta de la cuidad, toma el hatillo y se va a zonas rurales a emprender. Gente valiente convencida de que va a ser su forma de vida desde ese momento.
Pero el otro día me planteaban: si te vas a trabajar a una zona rural, ¿es porque has fracasado?. Hay gente que lo ve así, si te vas a un pueblo es porque no aguantas la presión de la ciudad y te vas a (imagino que pensarán a esconderse) a una zona rural ¿¿¿???.
Lo escribo aquí porque me llamó la atención la forma de interpretar de algunas personas las decisiones de moverte de la ciudad, y como choca con las historias que hemos visto de reinvención de mucha gente joven.
Luna de Reina es una historia de viñedos que se iban a abandonar en Alicante, y de cómo hay gente joven que se hace cargo de esos viñedos convencidos de quedarse en la zona rural.
Es una historia con final feliz donde los vinos que se obtienen son asombrosos, es la historia de unas uvas que salen de un viñedo de poca producción, muchos años, cuidados por gente con sabiduría y una esmerada elaboración, claro, así no tiene ningún misterio que los vinos sean buenos.
Lo que sí es un misterio (e imagino sobre todo para la gente que piensa como os he contado) es cómo se plantea una persona joven coger de la mano un viñedo a punto de abandonarse y esforzarse por hacer buen vino.
Luna de reina nos contesta a esa pregunta con su etiqueta, la mujer barbuda: si tapas la cabeza de la mujer ves la parte inferior de una dama, algo normal, pero si tapas la parte inferior ves algo raro, una mujer barbuda.
Este dibujo lo dice todo, es raro que la gente joven quiera vivir del campo, sobre todo cuando ha estudiado una carrera ¡cómo va a volver todo un universitario a la tierra de tus padres!. Con esa mentalidad hay gente que ve esta decisión como un fracaso, no como un acto de valentía, y a estos emprendedores como mujeres barbudas, gente rara, nada más lejos de la realidad. Son gente que ven claramente lo arriesgado que es continuar con las tradiciones.
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